En nombre de nuestra organización, queremos agradecer la solidaridad y el apoyo de todas las personas en el caso del joven activista saharaui que enfrentaba la deportación a Marruecos tras el rechazo de su solicitud de asilo por parte de la Audiencia Nacional.
El compromiso y la movilización a favor de Youssef, el activista saharaui de 23 años que llegó al aeropuerto de Bilbao el 23 de junio y que permaneció allí hasta la madrugada del sábado 6 de julio, ha sido fundamental. Visibilizar este caso en medios de comunicación, redes sociales, concentraciones y la acción directa de la ciudadanía para frenar su deportación han sido esenciales para que el juzgado de guardia de Bilbao lo haya puesto en libertad para que pueda continuar con sus procesos legales y solicitud de protección internacional. La presión directa ha hecho que se reconsiderará su situación gracias al apoyo por la comunidad saharaui en nuestro territorio y la empatía de la sociedad.
Este caso ejemplifica la importancia de la solidaridad y la acción colectiva en defensa de los derechos de las personas refugiadas, migradas y apátridas que huyen de sus países por necesidad debido a las guerras, conflictos, violencia de género, discriminaciones y persecuciones por identidad sexual, entre muchas otras.
Desde Zehar-Errefuxiatuekin hemos apoyado con todas nuestras herramientas y vías posibles la causa de joven estudiante de Derecho en Agadir que tenía una historia de persecución muy bien fundamentada y documentada. A través del presidente de Zehar-Errefuxiatuekin, Javier Galparsoro, estuvimos acompañando y apoyando a los abogados de Youssef, así como realizando las portavocías públicas de los avances que se daban con el previo consentimiento de los letrados y cumpliendo la normativa correspondiente.
Zehar-Errefuxiatuekin apoya y acompaña a todas las personas que quieren solicitar protección internacional, tramitar su solicitud de asilo con nuestro equipo jurídico, así como el estatuto de apatridia para garantizar los derechos fundamentales de las personas refugiadas, migradas y apátridas para evitar situaciones de desprotección y desigualdad.